diàlogo con la pared de lado y al lado.

Tengo algo importante que decirte. Pero me està interrumpiendo un beso ajeno, y el tuyo tambièn. Te dirè lo que debì decirte hace tiempo. pero no deja de pasar gente con olor a cocina. ¿A que olerà la morfina? Yo sè que no te gusta cuando hablo asì pero asì me conociste y asì vas a tener que aguantarme, pero eso es otra historia, ya dèjame decirte lo que vine a decirte. Aquí entra la distancia a interrumpirme, y eso no es bueno porque entre nosotros hay muchos secretos. Conversaciòn encriptada. Abro mi boca y no me escuchas, cierro mis ojos y te veo amenazarme, tu gesto de tirana me hace cosquillas debajo de la barbilla. Y no, no sabes lo que estoy por decirte. No, no es que me haces falta, ni que dejaste mi almohada apestando a ese perfume de Mary Kay; no, tampoco tengo que decirte que me debes 200 pesos (que con la inflaciòn creo que ahora es una pequeña fortuna para un desempleado hambriento como yo). Dejà (con acento para cagarte màs la madre) de pensar por mi. Mejor piensà en mi. Nunca logro comunicarme bien contigo, Aunque de alguna forma sabes lo que yo necesito. Y a menudo pienso que tù no necesitas mis palabras. Tal vez un beso, pero esas cosas no te gusta admitirlas. Y otra vez no te diije lo que te vine a decir, y aunque, te repito, tal vez no lo necesitas oir, lo deberé decir, en algùn momento.